La Policía Nacional encontró sin vida a Emilio Lusquiños, un vecino de La Coruña de 68 años. Su desaparición, alertada por amigos, culminó en un triste desenlace después de un reciente cambio radical en su vida.
Muerte natural confirmada
El pasado octubre, Emilio ganó 1,2 millones de euros en la Bonoloto. Fue el único acertante de este premio significativo. A pesar de la natural curiosidad que generó su fortuna, la Policía ha esclarecido que su muerte se debió a causas naturales.
Un golpe de suerte
Emilio vivía en la calle del Orzán, donde compró el boleto ganador. Según informes locales, no tenía pareja ni hijos, lo que llevó a sus amigos a alertar a las autoridades tras no tener noticias de él durante un par de días. Estuvieron a su lado, especialmente después de que se convirtiera en millonario.
Disfrutando la fortuna
Tras el sorteo del 17 de octubre, Emilio celebró su fortuna con amigos, disfrutando de una gran comida y compartiendo actividades que le apasionaban. Su vida cambió drásticamente, y se acercó aún más a quienes le rodeaban.
Pasiones y aficiones
Emilio era un fiel seguidor del Deportivo de La Coruña. En los últimos meses, viajó a Tenerife para asistir a un partido de su equipo. Tenía planes de ir a Málaga este sábado para ver otro encuentro. Sin embargo, su vida se desvaneció sin aviso, marcando un triste giro.